Las dietas balanceadas tienen muchos beneficios y no son necesariamente costosas

Las dietas balanceadas tienen muchos beneficios y no son necesariamente costosas

Algunos de estos beneficios son:
Reduce el colesterol LDL (“malo”) y eleva el colesterol HDL (“bueno”) en la sangre
Aumenta la capacidad antioxidante de las células
Reduce la presión arterial y mejora la reactividad vascular o función endotelial
Estimula mecanismos que disminuyen el riesgo de cáncer
Disminuye el riesgo de trombosis vascular
Regula el sistema inmune y reduce la inflamación
Sus probidades nutricionales se deben, en primer lugar, a la abundancia de frutas y verduras, al uso de aceite de oliva y al consumo moderado de vino tinto con las comidas. Es rica en antioxidantes, que nos protegen de los radicales libres que favorecen el cáncer y el envejecimiento en general. a demás al tener este tipo de alimentación, los ácidos grasos Omega-6 y Omega-3 que previene el riesgo cardiovascular, a diferencia de las dietas. El uso del aceite de oliva como principal fuente grasa la hace rica en ácidos grasos omega 9, mientras que aquellos alimentos asociados a probabilidad de trastornos cardíacos -como el azúcar, la sal y las grasas saturadas de la mantequilla, crema y carnes rojas grasas- se usan menos, privilegiando el uso de hierbas y especias como sazonadores, de frutas como postre y de pescados como fuente de proteína animal.

Una comida balanceada nos protege de las enfermedades crónicas y nos permite vivir más y mejor.
Es por esta razón que debemos cuidarnos, priorizando los vegetales y pescado, si en la zona donde vives no hay pescado, ¡te recomiendo que uses el enlatado!, y si no puedes comprar aceite de oliva, remplázalo por uno de maravillas.

Además, incorpora la actividad física como requisito fundamental y promueve los beneficios que el consumo regular y moderado de vino reporta a la salud, en las personas que tienen este hábito.